Alergias alimentarias en la infancia

Entre las consultas que nos hacen los padres,  con mucha frecuencia, ocupan un lugar preferente las alergias de tipo alimentario, las cuales van en claro aumento.

Los motivos de consulta son múltiples, desde un rechazo del alimento causal, a cuadros digestivos como vómitos y diarreas, sin olvidar problemas cutáneos donde la piel sufre en forma de urticarias e inflamaciones (hinchazón o también llamada angioedema) que según el lugar de aparición, puede llevar a situaciones de peligro, cuando por ejemplo se sitúa en un sitio tan estrecho y tan vital como es la glotis, justo donde a nivel de cuello, se inicia el paso de aire hacia tráquea , bronquios y pulmones en general.

Y para finalizar ese variado abanico de problemas alérgicos que pueden causar las alergias a alimentos, como situación dramática extrema es el shock anafiláctico, que puede llevar a situaciones irreversibles.

Afortunadamente, la inmensa mayoría de reacciones suelen ser de carácter leve, y de fácil solución, siendo siempre necesaria, la realización de un estudio de alergia que llevará a la identificación de la causa, y así poder llevar a cabo, unos consejos de evitar el alimento.

Los alergólogos infantiles, tenemos a favor, la clara colaboración de la familia, en cuanto a control de los alimentos que le producen síntomas al paciente; no obstante y como problema del día a día, tenemos una gran lucha identificar en ocasiones, alimentos que están enmascarados, o bien solo presentes en pequeñas cantidades (trazas) y que si el niño es muy alérgico y los consume, pueden dar asimismo origen a problemas.

“ Más del 50% de los niños alérgicos han tomado el alimento por equivocación “.

Los alimentos que con más frecuencia causan alergia son:

  • Leche, huevo y pescado en edades tempranas
  • Frutas, especialmente las denominadas rosáceas, tales como el melocotón, manzana y cerezas, a partir de los 5 años
  • Frutos secos, en edades un poco más avanzadas

 

Soluciones aconsejadas

  1. Identificar los alimentos causantes
  2. Sensibilizar a escuelas, y restaurantes, donde se producen cantidad de reacciones evitables
  3. Disponer de medicación para solucionar de inmediato una potencial reacción grave (la  aplicación sencilla de adrenalina autoadministrable, puede salvar una vida !!)
  4. Y siempre, acudir al especialista, el cual diagnosticará y tratará, y según que alimentos, como la leche y el huevo, conseguirá que pueda tolerar para siempre, dichos alimentos necesarios mediante técnicas de desensibilización, hecho que hace años era una auténtica quimera

 

Dr. Enrique Martí Guadaño

Jefe de Servicio Alergia Hospital Universitario Sagrat Cor. Barcelona